jueves, 19 de diciembre de 2013

Antología "Canción desesperada": Víctor Botas

Días de otoño
                        El viento agita
las copas de los álamos
que empiezan a volverse
de un ocre delicado.

                        Caen las hojas
heridas en las calles
con un silencio grave que resulta
de lo mas insidioso.

                        Huyen
todas las golondrinas de la escena
como espantadas por una mano gris
y amenazante.

                        Y llueve. Y llueve.

                                   El mar
ya no es el mar aquel de este verano
que yo miraba trémulo y perdido
mientras tú ibas llegando con paso indiferente.
De qué me sirven Tácito y la noche
Y esta ansiedad y el Támesis.
                                  
                                   y nada.
Mi corazón intenta protegerse del desastre
Envuelto en una toga de nostalgia.



Víctor Botas (1945 – 1994) Es un autor oventense licenciado en Derecho por la Universidad de Oviedo que se dio a conocer como poeta con el poemario Las cosas que me acechan al que le seguirían otros como Hisotoria antigua o retórica. Además ha publicado en su libro Segunda mano versiones poéticas de diversos autores, pero su obra no se queda en este género sino que también ha publicado novelas como Rosa rosae.

Antología XX: Pablo Neruda

Cuántas veces, amor, te amé sin verte y tal vez sin recuerdo... 

Cuántas veces, amor, te amé sin verte y tal vez sin recuerdo,
sin reconocer tu mirada, sin mirarte, centaura,
en regiones contrarias, en un mediodía quemante:
eras sólo el aroma de los cereales que amo.

Tal vez te vi, te supuse al pasar levantando una copa
en Angola, a la luz de la luna de Junio,
o eras tú la cintura de aquella guitarra
que toqué en las tinieblas y sonó como el mar desmedido.

Te amé sin que yo lo supiera, y busqué tu memoria.
En las casas vacías entré con linterna a robar tu retrato.
Pero yo ya sabía cómo era. De pronto

mientras ibas conmigo te toqué y se detuvo mi vida:
frente a mis ojos estabas, reinándome, y reinas.
Como hoguera en los bosques el fuego es tu reino.


Pablo Neruda (1904 – 1973) es un poeta chileno licenciado por la Universidad de Santiago, fundador de la revista Caballo Verde para la Poesía en Madrid. Tras regresar a hispanoamérica se vio forzado al exilio lo que le llevo a visitar varios países. Gracias a sus obras, en 1971 recibió el Premio Nobel de Literatura. Entre sus obras destacan Veinte poemas de amor y una canción desesperada, Los versos del capitán, etc.

Antología XIX: Luis Muñoz

El boleto
Encontró su nombre y su teléfono
en una servilleta de papel
doblada en el bolsillo.
Le estremeció aquel nombre
como un calor de plata,
le devolvió una noche
resuelta sin descensos,
y la visión fugaz, resplandeciente
de su piel canela.

Lo había conocido en un local
de luces acuosas y música de fuego.
Anduvieron a su casa charlando suavemente
entre las hojas secas, atravesando el río.

Quedaron en llamarse.
Y lo dudo un momento:
apostar esa noche o conservarla,
extender su memoria, o perderla de pronto.
No lo dudo ya al rato: quemó en el cenicero,
como quien teme un sueño,
como quien toma y deja las llaves del olvido,
desdoblado y letal, su boleto de apuestas.


Luis Muñoz (1966), poeta granadino, es licenciado en Filología Española y Filología Románica, ha publicado varios libros de poemas Calle del mar, Septiembre  o Manzanas amarilla, ha preparado la edición de El lugar de la poesía y dirige la revista Hélice. Es ganador del premio de Poesía «Ciudad de Córdoba».

Antología XVIII: Rafael Alberti

Amor de miramelindo
¡ay miramelindos, mira
qué estrellita tan galana,
suspira que te suspira,
peinándose a la ventana!

-Miramelindo, mi amor
mírame qué linda estoy.
mira qué roja color
que me puse por verte hoy.

Tú tan lindo en tu maceta,
regada por la mañana.
yo tan linda y pizpireta,

dondiego de mi ventana:
casadita a la retreta
y viuda a la diana.



Rafael Alberti (1902 – 1999) nos presenta en Marinero en tierra su primera obra publicada en 1924 y que mereció el Premio Nacional de Literatura de ese año otorgado por un ilustre jurado formado por autores de la talla de Ramón Menéndez Pidal, Antonio Machado y Gabriel Miró entre otros. Esta obra fue presentada con el título Mar y tierra que después se modificaría.

Antología XVII: Jesús Aller

Encuentro
Ven, dulce amada mía, enrédame en el vértigo
de las formas cambiantes que su cuerpo atesora;
contemplarte es gozar el sentido del mundo
y medir lo perfecto que nos lleva al origen.

Todo afuera es penumbra; vivamos estas horas
que los hados quisieron tejer para nosotros;
ven, que tú y yo sabemos que mañana no existe;
solo arder justifica las desdichas del tiempo.

Mientras tu desnudez silenciosa me embriaga,
quiero que me examines con tus ojos azules;
su pupila redonda bordará mi epitafio
y dirá que una vez visité tu locura.



Jesús Aller (1956) es un poeta gijonés y profesor de geología en la Universidad de Oviedo. Sus primeras publicaciones se corresponden con sus tres cuadernos de poemas Pájaro sobre mar, Non serviam y Teoría del centro, sin embargo, después de su interés por el mundo y sus viajes surgen otro tipo de poemarios como Asia, Alma y Laberinto entre otros. Sus artículos de crítica literaria suelen aparecer en la web de Rebelión.

Antología XVI: Miguel Hernández

Vals de los enamorados y unidos hasta siempre
No salieron jamás
del vergel del abrazo.
Y ante el rojo rosal
de los besos rodaron.

Huracanes quisieron
con rencor separarlos.
Y las hachas tajantes
y los rígidos rayos.

Aumentaron la tierra
de las pálidas manos.
Precipicios midieron,
por el viento impulsados
entre bocas deshechas.
Recorrieron naufragios,
cada vez más profundos
en sus cuerpos sus brazos.

Perseguidos, hundidos
por un gran desamparo
de recuerdos y lunas
de noviembres y marzos,
aventurados se vieron
como polvo liviano:
aventados se vieron,
pero siempre abrazados.



Miguel Hernández (1910-1942) es un poeta alicantino que, partiendo de Perito en lunas, va configurando una nueva mirada del mundo que pasa por varios temas como el compromiso político, el desgarro que provoca el amor, la lucha contra las tinieblas de la muerte, etc. Algunas de sus obras son Cruz y Raya, Perito en lunas o El rayo que no cesa.

Antología XV: Carlos Murciano

(Extramuros)
Aquel día escribí tu nombre en la columna
de cemento de un sitio en el que se detienen
los autobuses últimos de la ciudad. Tenía
todavía en mis labios las cenizas ardientes

de los tuyos. (No existen la soledad, el frío,
la rabia, la distancia, la tristeza, si vienes
desnuda hasta mis brazos y en ellos te refugias
como si en ese instante no supieras quién eres).

Sombreaban las nubes la piel del praderío
y mayo se vestía, despacio, de noviembre.
en el alero estaba, negra, la golondrina
y la lluvia caía, melancólica y tenue.



Carlos Murciano (1931) es un poeta nacido en Jerez de la Frontera con poemarios como Este claro silencio, Yerba y olvido, historias de otra edad o Sonetos de la otra casa, con el primero de ellos ganó el Premio Nacional de poesía.  Junto con su hermano fundaron la revista Alcaraván y, además cultiva la novela corta y el cuento lo que le ha llevado a ganar el Premio Nacional de Literatura Infantil.